Últimas Noticias. pp: 3

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El cronista de la ciudad, Guillermo Durand, contó que en la época republicana se escenificaron varias protestas en defensa del saneamiento del río Guaire.

Más cercano a nuestra historia, cuando Caracas iba a cumplir 400 años, se ideó una campaña gubernamental cuya meta era por “Un Guaire limpio”.

43 años luego, sigue siendo un sueño el saneamiento. La diferencia es que a los caraqueños le han ofrecido que en el 2014 correrá agua limpia. La tarea es posible si las autoridades no flaquean. De parte de los ciudadanos hay buenos augurios. Leamos algunos.

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“Si me quiero bañar en el río emblemático”

Limber Capote escribió que el río Guaire es un emblema capitalino, tanto como las torres de Parque Central. Dice que atraviesa la capital y que no sólo los caraqueños piensan en la desinfección, sino toda Venezuela.

“No tenemos nada que envidiar a las grandes urbes. Tenemos una ciudad con proyectos. Gracias a Ultimas Noticias nos hemos instruido con el especial aniversario 443 de Caracas. Me ha motivado a ser consciente en el peligro contaminante que tiene el río y que trabajando duro podemos tener lo que tanto apreciamos o que en algún momento nuestros padres y / o abuelos disfrutaron. No pierdo las esperanzas de verme en una foto sosegado al borde del río Guaire”.

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“Sin voluntad política es una falacia”

Narciso Tovar, habitante de Macarao, dice que mientras se logran estos tópicos de saneamiento, por lo menos hay que tenerlo drenado y libre de obstáculos, como basura, indigentes y escombros. “El río nos ha echado grandes vainas como la crecida del 48 que se llevó el hipódromo de El Paraíso. Lo viví porque mi familia humilde habitaba debajo del puente 9 de diciembre. Es parte de nuestra historia. Hay canciones de Billo’s, de Medio Evo… Por ello pienso que es buenísimo todo lo que se haga para limpiarlo. Todo depende de nosotros y del Gobierno que no se olvide de sus deberes”.

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“Limpiar las quebradas ante todo”

Rafael González, lector, comentó que primero se deben limpiar todas las quebradas, mediante la utilización de rastras como las que tienen las retroexcavadoras y que canalizadas sobre rieles a ambos lados del caudal permite quitar escombros. Con ello, el cauce estaría libre y despejado para las lluvias y así las aguas entraría más libres al Guaire. 

Adicionalmente el agua del río hay que extraerla en secciones y aplicarles procedimientos potabilizadores para devolverlas limpias.